miércoles, 27 de julio de 2011

BURROS DE CARONDELET


LA PIEZA BUU EN LA PLAZA DE LA IDENPENDENCIA


DON EVARISTO Y SU AMIGO ARMANDOSE UN GRIFO


LUIGGI STORNAGIOLO "EL QUE PIENSA PIERDE"



BURROS DE CARONDELET LISTOS PARA EL VIAJE A GUAYAQUIL



PIEZA BUU- FACEBOOK TE EMBURRECE


PIEZA BUU, "BURROS PARA TODOS"


TUSH "LOCA POR MI TIGRE"



PRESENTACION DEL BURRO DE LUIGGI, BARRIO LA FLORESTA-QUITOLANDIA


UN BURRO NOCTURNO EN LA PLAZA INDEPENDENCIA

miércoles, 20 de julio de 2011

BURROS LLEGAN A GUAYAQUIL


MARCELA NORIEGA - HOYOS MENTALES



VALENCIA- ESPAÑA


LORENZO ANTONIO- CONTRA EL RACISMO

LOS ANDES- CHILE

GUAYAQUIL EN 4 PATAS

Guayaquil de cuatro patas: caballos, burros y el dilema cívico

Si Los Caballos de Colores representan las aspiraciones del M.I. Municipio de Guayaquil de alcanzar el panteón de “ciudades globales”,  Los Burros Pintados expresan las inquietudes de muchos guayaquileños sobre su lugar en el nuevo orden del Guayaquil regenerado, del Guayaquil aspiracional.  Guayaquil no es la primera ciudad que se ha aprovechado de una exhibición al estilo del CowParade, de hecho, tales exhibiciones de animales pintados actualmente forman parte de un modelo de Empresa Municipal, el cuál se caracteriza por un esfuerzo de comercializar lo “local” (o sea convertir cultura guayaquileña en capital cultural) y competir con otras ciudades en un mercado global para la atención de turistas e inversionistas extranjeros. 

De más está decir que el proceso de “city-marketing,” el proceso de (re)crear la imagen de una ciudad, es selectivo y dirigido por los intereses de un grupo delimitado y poderoso.  El hecho de que la clase gobernante de Guayaquil ha seleccionado el “caballo” cómo un símbolo de la ciudad no es un simple ejemplo de los delirios de grandeza de la élite guayaquileña, es parte también de un esfuerzo reorganizar la jerarquía espacial de la urbe y reforzar cierta imagen de la vida cívica de la ciudad (hacia adentro y hacia fuera). 

Aunque hoy en día el burro está vinculado con la marginalidad, no siempre era así.  Antes el burro era uno de los animales domesticados más visibles en el centro de la ciudad, mientras el caballo era un animal que ocupaba los espacios periféricos, como el famoso Jockey Club de los principios del Siglo XX.  Después de una campaña municipal que sigue hasta hoy, los metropolitanos han hecho que desaparecieran las humildes bestias de carga de las calles principales de la ciudad.  Fue así que se les asignaron a los metropolitanos el apelativo, “robaburros,” y fue así que el burro llegó a ser un animal marginal (en todos los sentidos) y un símbolo de los supuestos estorbos al progreso, aseo, y orden de la ciudad. 

Los Burros de Guayaquil: Ayer y Hoy












Esta sutura temporal, moral, y estética vale para desconocer los períodos de intervalos en que la clase obrera de Guayaquil y sus fincas de cacao se convirtió en una clase de lumpen. También desconoce el desarrollo de la máquina política populista que trasformó los barrios marginales de Guayaquil en una de las fuerzas electorales más formidables del país. Y sigue desconociendo las raices cholas, indígenas, montubias, y afro tanto de figuras famosas (Julio Jaramillo, Jaime Hurtado, Guillermo Davis, y Medardo Ángel Silva) como las personas olvidadas y olvidables que han construido esta ciudad (los obreros del astillero, del ferrocarril, las fincas de cacao, la cervecería nacional, del cemento nacional, los informales, los ganaderos, y los pescadores). Tal diversidad cultural, cómo el burro, no es visto como un recurso o una ventaja, sino otro obstáculo al progreso. Pues no fue sólo la corrupción y incompetencia de las últimas alcaldías populistas que crearon el estado de anarquía y suciedad que puso la ciudad de rodillas, también un efecto de las migraciones, asentamientos y la supuesta incoherencia cultural que conllevaron.

Así somos los guayaquileños

“…Antes de definir las caracteristicas peculiares de los guayaquileños tenemos que entender que a través de su historia, esta ha sido una urbe forjada al impulso de migraciones internas y externas. Aquí convergen y se sienten guayaquileños, ciudadanos que llegaron de todas las regiones de la patria, mirando a Guayaquil como la ciudad de la esperanza.  Por eso en cualquier esquina es común escuchar acentos serranos y costeños, cholos, negros, montubios, indios, todos amalgamados en un crisol de ecuatorianidad…  Para ser mejores ciudadanos nos hacen falta rescatar algunas virtudes que antaño fueron parte de la identidad guayaquileña.  Entre ellas: a) la lucha por el bien común más que por la satisfacción de ambiciones personales; b) la entrega al servicio público anulada hoy por un tremendo individualismo y un arribismo político desmedido; c) pasar de la palabra a la acción (ser menos bocones y más trabajadores); d) conocer y respetar las leyes y ordenanzas que para la mayoría son letra muerta; y fundamentalmente establecer un compromiso de amor sincero con la ciudad, para entregarle el fruto honesto de nuestro diario esfuerzo, honrándola con nuestras mejores realizaciones y preocupándonos por ella, no solamente en julio y octubre.

—Jenny Estrada Ruiz, Historiadora (Diario Expreso, 21 de Julio 2002)



En la medida de que el municipio de Guayaquil ha creado una marca basada en la superación permanentemente del anterior estado desgraciado y sucio de la época populista, un burro no serviría cómo mascota de la ciudad. Según la narrativa oficial, el renacimiento de la ciudad es debido a un civismo criollo y adinerado, que ha apropiado cómo su modelo social una versión aséptica de la época dorada de los años 20. La fusión semántica de la gran era caocatera con la de regeneración urbana es un intento por crear un referente histórico a un período en la historia de la urbe en que Guayaquil había logrado un estatus internacional de ser una ciudad vanguardista, liberal, dinámica, y cosmopolita. Un eslabón semántico que conecta estas épocas es el caballo de raza, un animal que, por su costo, evita cualquier asociación con lo popular urbano. Para los guayaquileños, el caballo es un animal que crea una continuidad entre la época del centenario—en lo cual el Jockey Club cedió parte de su terreno para que se construya la primera ciudadela planificada y exclusiva, el Barrio Centenario—y la alcaldía de León Febres-Cordero, el ingeniero de la regeneración urbana y un aficionado infatigable de la crianza de caballos y del deporte hípico, siendo uno de los ilustres espectadores habituales del Hipódromo Buijo de Samborondón.

Los Caballos de Guayaquil: Ayer y Hoy


                       

                                                           

                       
Entonces los requisitos de vestimenta y comportamiento en las zonas regeneradas no sólo reflejan el deseo por parte del Municipio de cambiar superficialmente la imagen de la ciudad para el consumo de turistas, más bien representan un esfuerzo por armonizar desde adentro la vida e identificación de todos guayaquileños con el fin de crear una identidad cívica orientada a las aspiraciones de la elite. Sin esta coherencia  resulta más difícil comercializar las micro-culturas barriales y étnicas de la ciudad. Por lo tanto los caballos corresponden a la identidad cívica aspirante y emergente. Son una parte de la imagen que quieren transmitir hacia el mercado global de ciudades. Los caballos son concretos, valiosos, intocables, y dignos, mientras los burros son efémeros, fugaces, clandestinos, despreciables, y heterogéneos. Su desmontaje brusco destaca el hecho de que la campaña municipal no sólo trata de orden y aseo, pero también una lucha simbólica sobre el espacio urbano y qué significa ser verdaderamente guayaco.
  
                                                                                ANONIMO

domingo, 17 de julio de 2011

EQUINOS VARIOPINTOS EN EL PUERTO

Tomando como modelo para armar localmente el formato escultórico de intervención urbana del Cow Parade generado en Zúrich en 1988, en Guayaquil surge la propuesta "Los Caballos de Colores" dentro del proyecto Arte Urbano Guayaquil 2011. Antes ya se dio algo similar en Quito, en el 2007, en donde las vacas technicolor suizas fueron reemplazadas por el supuesto “animal simbólico” de la capital: el toro. En Guayaquil se optó por el caballo.
Veinte y siete artistas ecuatorianos fueron seleccionados para pintar o intervenir estos caballos de fibra de vidrio, la mayoría de ellos utilizándolos a manera de soporte o lienzo para sus temáticas habituales, plasmadas con óleos, acrílicos y/o esmaltes. Sería interesante analizar en este caso (como en el quiteño) cómo y de qué manera se reflexionó en el sentido contextual, urbano, ideológico, dialógico y político de un emplazamiento objetual, escultórico, alegórico y simbólico en el espacio público, de estos dispositivos plásticos y estéticos puestos en escena, exhibición y apreciación a lo largo del Malecón 2000 y en la Plaza de la Administración, pero también, de estos dispositivos de reflexión, tensión, interrelación y debate extendido en y para la esfera pública, relacional y convivencial.
Muchos artistas, estetas y espectadores podrán tener la noción de que el “formato equino technicolor” se daba para eso, para movilizar la obra plástica tridimensional ya no del taller a la galería, sino del taller la calle… y justamente es en este eje tensional del proyecto “Caballos de Colores” que hay mucho de las articulaciones conceptuales, estéticas y sociales, y de la construcción de lógicas/sentidos discursivos, artísticos, políticos y públicos desde las mismas autoridades, instituciones o administradores de la cultura que importan y replican formatos escultopictóricos de intervención urbana a nuestro país, que los producen, financian y publicitan sin lo que considero un suficiente sentido contextual, crítico y propositivo al respecto, desde y para un debate y una escena artística contemporánea local y nacional.

En Quito, una contrapropuesta a lo que fueron los toros de colores, una intervención artística e ideológica en el espacio público “de resistencia” o deconstructora a importados modelos variopintos fue la realizada por La Selecta Cooperativa Cultural, la cual “consistió en ‘aplicar’ una sombra de papel negro con manchas rojas en el lomo a los toros que estuvieron expuestos en la Plaza de los Presidentes”, en clara alusión y crítica a la “fiesta brava” capitalina.
Mas información al respecto:

En Guayaquil, como respuesta o contrapropuesta irreverente, lúdica y sabrosona, propia de él y de su arte, tenemos la que actualmente está desarrollando Jorge Jaén frente al proyecto “Caballos de Colores”, sus “Burros de Colores”.
Respecto a este work in progress de Jaén, adjunto dos archivos con textos sobre el mismo, remitidos por este artista. Se pueden encontrar algunas imágenes de lo que hasta ahora se ha trabajado en Guayaquil en el siguiente link de Facebook de Amaury Martínez:
Y el blog de “Burros de Colores” es:

Ante las actuales políticas urbanas de represión y censura municipal en contra del grafiti, el stencil y el street art en Guayaquil, ante la desatada “caza” de artistas o gente que intervenga el espacio público con sus manifestaciones estéticas, plásticas o gráficas, de parte de la Dirección de Justicia y Vigilancia, en conjunto con el Municipio de Guayaquil, el proyecto de Jaén toma en los actuales momentos una dimensión no solo subversiva, sino eminentemente política, de resistencia y contrapoder hacia un sistema cerrado y represor que busca a través del ejercicio del poder público y de la intimidación basada en la denuncia renumerada, limitar, controlar, condenar y castigar la libertad de expresión y creación ciudadana y artística en el puerto principal.

Saludos,

BURROS EN CAMISETAS

Con la propuesta, surgio la necesidad de hacer un catalogo donde quede registrado todo el movimiento y colaboracion de los artistas a nivel nacional. Por esto se considero realizar camisetas de los diseños monocromaticos que hayan diseñado los artistas participantes. He aqui la primera camiseta realizada, con diseño de Rodolfo Kronfle Chambers, "El Burro Tony Camo".

viernes, 15 de julio de 2011

BASTA DE LA REPRESION, NO MAS CENSURA.. VIVA EL ARTE

¿Qué opinan los artistas o gente de la cultura de Guayaquil ante esto?

Antonio Moscoso
Mil dólares por enviar información de quienes dañan bienes públicos o privados
Los denunciantes pueden acercarse a la Dirección de Justicia y Vigilancia a denunciar o llamar al 2599100 extensión 3058.
La Dirección de Justicia y Vigilancia en conjunto con el Municipio de Guayaquil, ponen en marcha un plan para incentivar a las personas denunciar a quienes dañen propiedad pública o privada.
La recompensa es de 1.000 dólares a quien envíe información concreta, con pruebas, por medio de cualquier medio sea este video, grabaciones, fotografías, declaraciones firmadas, que permitan evidenciar a uno o varios individuos pintando grafitis o manchando, propiedad pública o privada, o que estuvieren ocasionando daños o sustrayéndose elementos del mobiliario urbano como son: tachos, rejillas, tapas de alcantarillas, rejas o especies arbóreas o invadiendo con vehículos los carriles de la Metrovía.
Los denunciantes pueden acercarse a la Dirección de Justicia y Vigilancia a denunciar o llamar al 2599100 extensión 3058. Se guarda absoluta reserva.

Dicha información permitirá que la corporación municipal ejerza las acciones y sanciones previstas como son: en el caso de los gartifis, la prisión de hasta 7 días y trabajos comunitarios repatrando el daño causado o como en el caso de la sustración o daño de bienes públicos, el inicio de las acciones penales correspondientes que conllevan hasta 2 años de prisión y en el caso de la invasión de los carriles de la Metrovía, una multa equivalente al 10% de la remuneración básica unificada del trabajador en general y reducción de 3 puntos en su licencia de conducción.

http://www.eltelegrafo.com.ec/index.php?option=com_zoo&task=item&item_id=9721&Itemid=14

rizoma-ecuador@yahoogroups.com

MAS CULTURA, LA JUVENTUD COLABORANDO CON LOS BURROS DE COLORES...

                                                Doris Arboleda y sus alumnos en Naranjal city

                                                        










lunes, 11 de julio de 2011

REDACCION EXPRESIONES

Intervenciones callejeras en la ciudad

Con burros satirizan a los caballos de colores

Por Redacción Expresiones

  • Calificación:
29 de Junio de 2011 - 20:14
En vez de caballos “elitistas”, burros de “la periferia”. En vez de esculturas de fibra de vidrio como soporte, el recurso de la pared y el grafiti. Desde la semana pasada han aparecido en la ciudad coloridos asnos que encarnan una sátira al proyecto Arte Urbano Caballos de Colores 2011, inaugurado en mayo por Diners Club y el Municipio de Guayaquil. Se trata de los Burros de Colores, una idea de Jorge Jaén, cuyo trabajo está marcado por la marginalidad.
Es una crítica no solo a Arte Urbano, sino a la forma en que los estamentos oficiales manejan el arte en la ciudad, según explicó Jaén. El artista guayaquileño ha convocado a escultores, artistas plásticos, músicos, escritores y bailarines para ampliar y crear nuevas visiones de arte callejero con respecto a la propuesta original. Muchos de los “burritos” han sido pegados en la Av. Francisco de Orellana, inmediaciones del World Trade Center, otros en las calles aledañas a la zona rosa. Pero también hay los “robaburros” -como llama Jaén-, quienes retiran las obras realizados sobre papel kraft.
“Además le estamos rindiendo un homenaje al burro, animal que ha colaborado con el progreso de las sociedades”, justifica Jaén, quien representó a Ecuador en la Bienal Internacional de Cuenca 2009. El artista presentó una propuesta para pintar un caballo, pero su equino -tacones y labios pintados con un feísta jinete desnudo, de falo descomunal- no fue aprobado.
Con los burros empezaron tres artistas: la escultora María José Zurita, el cantautor Christian Fabre y el mentalizador. A ellos se han unido, entre otros, Gabriela Chérrez (ganadora del Salón de Julio 2007) y artistas de Cuenca y Quito que “mandan sus burritos”, como Luigi Stornaiolo. Patricia León, quien pintó uno de los 31 equinos de Arte Urbano, se animó también a crear su propio burro. “Pero le dije que lo pintara mejor que el caballo”, bromea Jaén.
La noche de ayer el grupo tenía previsto pegar 20 nuevas obras. La ilegalidad es el eje de la iniciativa, pues los trabajos son elaborados previamente en una plantilla y son estampados por las noches.
Crítica al proyecto original
Más directa ha sido la crítica formulada a Caballos de Colores por Ana Rosa Valdez, licenciada en Historia del Arte y docente del ITAE. Algunos de sus alumnos intervinieron esculturas equinas. “Las ‘propuestas’ se han caracterizado por una extraordinaria capacidad de irreflexión sobre las dinámicas sociales, culturales, políticas y territoriales que caracterizan los lugares de emplazamiento”, escribió para el portal Río Revuelto. “La tendencia ha sido trasladar una poética autoral a la superficie del soporte escultórico (...) Pura maniobra de traslado con ínfulas de experimentación. Pirotecnia creativa, salvo poquísimos casos”. Entre las excepciones menciona el caballo instalado en el Parque de las Iguanas, frente a la escultura ecuestre del Libertador de América, “que pone en jaque las nociones históricas sobre la figura mítica de Simón Bolívar”.
La exposición Caballos de Colores, iniciativa celebrada por medios y ciudadanía, estará abierta hasta el 19 de julio en los alrededores del Malecón. Arte Urbano pretendió “sacar el arte a las calles, promocionar los trabajos de los principales artistas de la ciudad y la provincia, y ayudar a Solca con una causa benéfica”, según sus organizadores, liderados en el plano artístico por la curadora Inés Flores. AGV

BURROS EN MARCHA (QUITO)

El proyecto ha contado con la participacion de artistas quiteños, con los cuales con el artista Jorge Jaen se recorrera las avenidas quiteñas trayendo a los burros de la sierra para desfilar en las galas Guayaquileñas. Se cuenta hasta el momento la participacion de Luiggi Stornagiolo, Chucky Vaca, Falco, Mafo Lopez, Danilo Zambrano, Pelota Cuadrada, David Santillan, Rodrigo Viera, Carlos Vaca, Paul Rosero,Fausto Villalba, Giovanny Verdezoto, Andres Villalba, Andrian Balseca, Roberto Jaramillo, El Rockero, Ana (escritora), Alfonso Fares, Pedro Cagigal, Juan Carlos Cucalon y muchos mas que el dia 12 de julio se encontraran para la intervencion de los burros.

Mas Burros, mas guayaquil!

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Jorge Jaen, Falco, Fausto Villalba, Carlos Vaca, Cristian Fabre, Maria Jose Zurita                                                 (Parque del Ejido)

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Taller de David Santillan (Ichimbia)


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El Rockero

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Roberto Jaramillo

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Edison Chucky Vaca





Intervencion de los niños en el Centro de Arte Contemporaneo Quito



Burrito de Mar (Serie Cevicheria)


Ponle la Concha al burro



Llegada a Quito
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Quito Emburreciendo Guayaquil..

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Marywuan y Jorge Jaen

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Hospital del Niño

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