TEXTO : EFRAIN ROBLEY ( MENTALIZADOR JUNTO A JAEN DEL PROYECTO)
Cierto sector de Guayaquil, emparentado con una elite que solo defiende los intereses del grupo a que se debe, y que excluye a la inmensa mayoría de Guayaquileños que constituyen los sectores mas importantes del trabajo y de desarrollo de nuestra ciudad, que si conocen en su diario vivir las realidades de esta su ciudad, Guayaquil, y de su provincia, ha mirado con asombro como empleándose, los criterios de esa elite antihistórica, se pretende hacer aparecer como Arte Guayaquileño, la ultima exhibición de caballos, entregados en serie, a los artistas, a quienes se ha obligados a pintarrajearlos, y que esto se constituya, como un símbolo de la ciudad. No saben estos “creadores” de Arte que esta ciudad, desde su inicio emplea a los burros, llamados también asnos, y pollinos, en todos los trabajos y servicios, que requería este pueblo Guayaquileño y todos los pueblos de nuestro país.
Esta es una ciudad, un pueblo, que le debe mucho a los burros, recordemos que quienes abastecían agua a Guayaquil, los aguateros, no empleaban caballos, si no burros, lecheros, panaderos, constructores, comerciantes, siempre contaban en sus trabajos y servicios, con el burro. El burro nos es elitista, no participo en las masacres, cometidas en nuestros pueblos ancestrales, por los “conquistadores”, antepasados de esa elite. Ha sufrido pacientemente como nuestro pueblo, el uso y abuso que se ha hecho de ellos, y también se ha rebelado, cuando se ha agotado su paciencia. Ha servido incluso, para la alimentación, en numerosos pueblos de nuestro país. Quien no ha oído y algunos, se habrán servido las cecinas de burro de Loja.
Pero al burro, había que excluirlo como símbolo paciente y servicial y rebelde de esta ciudad, pecado que no cometió Cristo. Por ser burro. Se quiere imponer mentiras como verdades. De Guayaquil, la elite anti histórica y pelucona, dice que es la perla del Pacifico. Y donde hay perlas en esta ciudad. Pero si hay abundantes ostiones.
Guayaquil es la ostión del Pacifico. Correcto, como lo afirmaba PEDRO JORGE VERA. Guayaquil, no es el caballo del Pacifico, con el debido respeto para los caballos, Guayaquil es el burro del Pacifico, su mejor símbolo de trabajo, de paciencia de humildad de honradez y de rebeldía. Como es el Guayaquileño.
Por ello, todos nosotros, los que participamos en esta campaña para desenmascarar, a los mentidores de siempre, a los antihistóricos, los que no conocen, a este pueblo de montuvios de cholos, de negros, y que hacen uso del “arte”, con traumas colonialistas y serviles, decimos que el burro, si es un símbolo nuestro, que el Arte, así como la Historia, le debe mucho a los burros, a los que hay que ubicar, en el sitio que les corresponde, como el mejor amigo de este pueblo, de su trabajo, de su rebeldía y… de Dios.
PROCESO:
PRIMERA ETAPA
"BURRO SOBRE BURRO" AMAURY MARTINEZ
UN BURRO EN EL CENTRO DE GUAYAQUIL
BURRO TRAVESTI (HOMENAJE A MADONA)... TODA UNA POTRA
POR CRISTIAN LEVI
"A LOMA DE BURRO MIS SUEÑOS VAN" FAUSTO QUIROZ
"EL BURRO BLANCO DE JUAN PIGUABE" JORGE JAEN
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